sábado, 4 de agosto de 2012

MOJITOS Y CALOR

Si hay una bebida que quita la sed es el mojito, fresco, con olor a menta y lima, es una delicia para los sentidos.

No me gusta beber sola, beber para mi es socializar, estar con mis amigos, hacerme unas risas, sentirme parte de un grupo, de algo y de alguien, pero hoy después de unas cervezas con mi gente, de pasar un rato estupendo, he llegado a casa, y en esta calurosa noche de agosto he salido a mi terraza. Una suave brisa mece mi hierbabuena, que crece feliz ajena a toda preocupación, y he sentido la necesidad de hacerme un mojito.

Antaño los hacia para la persona que amaba, volvíamos de cenar y pasarlo bien, solos o acompañados, y era como el colofón  a una noche estupenda, sentados en esta terraza, yo preparaba los ingredientes, él cortaba la hierbabuena, y entre risas y achuchones lo preparábamos juntos. Nos sentábamos juntos a la luz de las velas vislumbrando nuestros perfiles, mirándonos a los ojos, acercándonos para darnos un beso fugaz , un roce de lenguas, una mano que se desliza tímidamente por el contorno de la mejilla.....

Momentos tan vividos que no los voy a olvidar nunca y espero que a pesar de los pesares él tampoco....

Hoy mi mojito es a solas con Valentín, el otro amor de mi vida, no hay besos ni caricias, pero es igual de hermoso porque en mi casa sigue reinando el amor. :-))